Autor: Gustavo Villegas
Técnica: Técnica mixta sobre papel
Tamaño: 130 x 150 cm.
Año: 2017
Esta pieza de Gustavo Villegas muestra una de sus series más representativas, en la cual el artista mexicano recrea “destrucciones” de coches. Dialogando entre la pintura y otras formas más apegadas a la tradición en tres dimensiones, es posible ver los efectos visuales que surgen de esta nueva plástica. Una hoja de papel en la que el pintor interviene con óleo es calentada y curada con resina cristal, de tal manera que la forma “arrugada” se mantiene, imitando esa destrucción. La obra de Villegas nos podría remitir rápidamente a la destrucción que propuso John Chamberlain, pero con una estética diferente. La estética de la fealdad es sutilmente remplazada, porque aunque la monstruosidad de un accidente automovilístico es fatal, la belleza de Gustavo Villegas se mantiene incólume. Busca otras salidas, busca otros recursos. Parece que crea algo a partir de esta destrucción. Más allá de las propuestas, como en el arte povera italiano, donde artistas como Kounellis buscaban un rechazo estético por parte del espectador, aquí nos maravillamos y nos intrigamos por la pieza. Una destrucción que crea, una deconstrucción que, como en el caso de César Baldaccini, es posible resignificar la propia crueldad y el dolor. No hay una narrativa que se inserte desde el imaginario de los accidentes automovilísticos, no hay una repercusión ideológica, únicamente estamos ante un artista que encontró en esta forma una herramienta para expresar su plasticidad, su creatividad y su discurso.
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